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domingo, 31 de diciembre de 2017

TODO LO QUE NECESITAMOS


Han sido fechas de mucho pedir. Cartas y cartas a los "reyes magos", a Santa Claus... Han pedido los peques y los grandes, porque casi todos creen necesitar.
Durante la Navidad y fechas previas, los niños, ilusionados y ansiosos, reclaman lo que poco después de Epifanía arrinconarán por innecesario. Y lo mismo les sucede a los mayores. Sienten que sus expectativas continúan sin llenar.
Creemos necesitar personas, cualidades, condiciones, objetos. Nos sentimos faltos de mucho.
Pero sólo se está necesitado de algo que exista en nuestro verdadero medio.
Un pez no precisa para vivir el aire puro de las montañas.  Es en el mar, en el río o en el lago, donde hallan el oxígeno imprescindible para su respiración branquial. Aunque no vean el líquido elemento siempre disponen de él, porque en él están, viven y se mueven.
Si la truchita o el bacalao ansiaran el aire que nosotros respiramos, nunca quedarían satisfechos, aunque lo consiguieran.
Por eso importa el saber donde está cada cual. Si pensamos que en la materia, ambicionaremos cosas materiales. Y nunca nos sentiremos saciados.
Si despertando descubrimos nuestro verdadero ser, nuestros deseos cambiarán. Porque siendo espirituales sólo tenemos necesidad del Espíritu, de Dios. Es decir, de Quien nunca tenemos falta.
Esa divina demanda se me puede presentar como necesidad de dinero, pareja, salud, paz, libertad, seguridad, trabajo, vivienda... o capacidades para aprender o actuar de alguna forma específica. Y será muy sanador caer en la cuenta que estoy, vivo y me muevo en Dios (1), aunque no lo vea como tampoco el pez percibe el agua en que se sostiene. Entonces, cuando soy consciente de Su presencia y contacto con Ella, Dios se me aparece como Aquello que satisface todas mis presuntas carencias, en forma de compañía, provisión, casa...
Porque el Amor divino siempre ha acudido a toda necesidad (2). Nuestro Padre sabe lo que precisamos. Por eso al encontrarle a Él, después de buscar su reino o gobierno, todo lo demás lo tendremos dado como añadidura (3).
1 Hechos de los Apóstoles  17:28.
2 Ciencia y Salud 494:12 "El Amor divino siempre ha respondido y siempre responderá a toda necesidad humana".
2 véase Lucas 12,30 y 31.


“TODO LO MÍO ES TUYO, SI PARA TI, SÓLO SOY YO”


La frase con que titulo esta reflexión puede parecer falta de lógica.
O confundirse con una adivinanza.
Su trasfondo es la respuesta del Padre al hijo mayor de la parábola. “Todo lo mío es tuyo”.
Todo lo que es de Dios pertenece también a sus criaturas.
Alguien me reprochó un día que eso sólo era teoría, porque en la prác
tica todavía no ha conseguido beneficiarse de esa divina propiedad.

Pero hoy tu pregunta me ha sacado de lo profundo del silencio, la respuesta.  
 “Muchas veces consigo permanecer en la alegría de Dios”,  me dejaste grabado en el buzón de voz de mi teléfono con un añadido doloroso: “Pero hoy no puedo. Por más que lucho me siento impotente”. Después me pediste una respuesta: “¿Cómo me mantengo en esa alegría”.
La clave es muy simple como todo lo verdadero: “Todo es Mente infinita”.
Fuera de esa Mente no hay más. Ni siquiera tú o yo.
Y Ella siempre está alegre. Ignorante del mal, no conoce la preocupación. Ni tampoco la carencia, los problemas, la soledad, la enfermedad o la muerte. Fuera de Ella,  nada le puede afectar, modificar o influir. Sólo es esa Mente infinita que es Todo.

Entonces, ¿qué somos nosotros? ¡Sus imágenes! Y mientras nos consideramos eso seremos conscientes de la Verdad y la disfrutaremos.
Sin embargo, ocurre que anhelamos y creemos tener “vida propia”.  Esa es la raíz de los problemas. No aceptar nuestra auténtica identidad: ser imagen de lo divino.
El reflejo que aparece en el espejo no tiene que preguntarse cómo levantar el pesado objeto colocado a su vera. Sólo Quien se asoma ante él ha de hacerlo todo.
Nosotros no necesitamos palanca para levantar carga alguna. Ni buscar remedios para estar siempre alegres. No es mi asunto privado, ni algo que yo tenga que resolver.
Dios siempre está alegre. Y así lo estoy reflejando, sin final. Y si soy consciente que sólo es Él, también gozaré de su eterna felicidad.
Mi alegría consiste no en experimentarla o dejarla de sentir, sino en saber que Dios es dichoso siempre. Reconocer eso, manifestarlo.
Creer que yo soy alguien más, es situarse fuera de la realidad. Y allí no hay existencia ni verdad, sólo nada y error.
Porque el hombre es el conocimiento de Dios, saber de Dios, conocer todo lo que es el Único, es disponer de todo lo Suyo.


viernes, 29 de diciembre de 2017

PREGUNTANDO PARA ENCONTRARME

¿Donde estoy y que está ocurriendo mientras pretendo centrarme, perdido, como sin norte e impotente para elevarme?
En el Uno siempre.
Y siendo amado con toda la humanidad perfecta que formamos el único y universal nosotros.
Sin ropajes personales de vanidad o sufrimiento.
Por eso, dejemos de atormentarnos con severos juicios que oscurecen el camino e impide la alegría.  
Porque solo del yo y las personalidades proceden las criticas y las condenas.
Protagonistas imaginarios de un universo onírico donde creemos estar cuando en realidad nunca nos hemos separado del Amor que es nuestra Vida.





HACIA LA VISIÓN PERFECTA

De nuevo el recuerdo de Teresita González-Quevedo me trae inspiración.
Aunque ya hace casi setenta años que nos dejó en plena juventud. 
Se trata de la oración que repetía incansable, una y otra vez: 
“¡Madre, (se refería a María de Nazaret) que te vea quien me mire!”. 
Yo, ahora, modifico y amplio un tanto, el deseo de aquel ángel:
Que todo aquel con que me encuentre hoy, conocido o desconocido, me vea y se vea, como el Padre-Madre nos ve”.
Y con ello me ejercito para alcanzar aquí la visión perfecta.

jueves, 28 de diciembre de 2017

28 DICIEMBRE

Al menos en España, hoy es el día de las "inocentadas" o bromas, dirigidas a los más crédulos, a los que después se les coreará "¡Inocente! ¡Inocente!" 
Así se ha vaciado de mensaje la celebración de "LOS SANTOS INOCENTES". 
Un genocidio horrendo que al perpetuarse tanto ya ha caído de las portadas de la prensa o de "las primeras noticias" de los telediarios. 
Pero hoy debiera ser "nuestro día" si nos atenemos al significado de la palabra inocente: 
"El que no hace daño". Al que no hay que temer.
Porque inocente no es el fácil de engañar, ni el blanco de nuestras risas, "sino aquel tan lleno de Amor que es incapaz de dañar al conocer sólo el Bien.
Así Dios es el INOCENTE por excelencia. 
Y vivir en la realidad, en Su infinita y armoniosa manifestación, es estar en un universo de Inocencia. 
Donde quien en realidad soy (somos) nunca ha de pagar por culpa alguna y aun menos por reflejar el Bien.
Lo contrario sería continuar en el sueño o en la pesadilla.

miércoles, 27 de diciembre de 2017

QUÉ DESEAR EN NAVIDAD

Celebro la Navidad en invierno.
Y en esos días me gusta encender la chimenea de nuestra cocina y contemplar las peripecias del fuego.
 Al principio sólo es una centellita de luz. 
Pero conforme recibe el soplo del aire se aviva.
La llamita tiende a lo alto y prende todas las ramitas.
Estas fechas nos recuerdan como el Cristo llega niño rodeado de fría intemperie y en el escenario de aparente pobreza.
Y pronto, día a día, bajo la acción del Espíritu, crecerá en gracia para ocuparse sólo de los asuntos del Padre-Madre.
Así está ocurriendo en nosotros. 
El constante soplo del Espíritu hace crecer el Cristo que irrumpió como un vislumbre, instalándonos en la feliz conciencia de la divina realidad.
Así, desearnos felicidad en estas fechas, es querer no dormirnos en la noche de la existencia, para descubrir gozosos como la Verdad despliega instante a instante el regalo de la Vida.
Y Ésta es el conocimiento de Dios y de su imagen, el hombre. (Juan 17:3)

 

martes, 26 de diciembre de 2017

EL MEJOR REGALO


Estamos en fechas obsequiosas. Cajas y más cajas de bellos envoltorios y coloridos lazos.
Un tiempo de recuerdos y de nostalgias.
En la pantalla de mi memoria aparece aquella mesita del living, adonde no llegaba ni de puntillas. Siempre cubierta de juguetes en la mañana de Reyes.  
(Entonces se regalaba sólo en Epifanía. Ahora el día de Navidad hace la competencia.)
Pero recuerdo como lo mejor el que mis padres se echaban al suelo y jugaban conmigo. Sin ellos, los juguetes no eran lo mismo, no eran tan divertidos.
Hoy quizás se regala más, y más días, porque los padres ya no jugamos tanto. Y ese vacío que casi nunca se reconoce, se intenta suplir con más y más objetos. Regalos pronto jubilados y con un destino. Llenar el cuarto de juegos de niños insaciables por insatisfechos.
Nos hemos olvidado, unos y otros, que el mejor regalo son los padres.
Eso mismo ocurre en otros ámbitos. Reclamamos de Dios cuerpos sanos, provisión abundante, relaciones felices, éxitos profesionales… Buscamos "los panes y los peces". A menudo andamos ocupados con esos deseos. Y cuando todo parece cumplirse, entonces descubrimos que continúa el hambre, que el hueco sigue sin llenarse.
Y es porque, la educación recibida también en ese orden nos desvía de lo importante y nos conduce a eso accesorio que sin el fundamento de lo sustancial pronto se vacía de sentido.
Buscamos a Dios para que nos proporcione o regale algo muy inferior a lo que puede dar.
Y así seguiremos debatiéndonos entre salud y enfermedad, carencias y prosperidad, amores o soledades, paz o desasosiego, hasta que no experimentemos que también aquí, el mejor regalo es nuestro Padre-Madre que se nos da siempre y gratis.

A TENER EN CUENTA SIEMPRE

Mi ser está en Dios, no en la materia. 
 Luego es perfecto y nunca ha sido dañado o ha necesitado de cura o reparación.
Y al todo y a cada uno les está sucediendo lo mismo. 
Por tanto, no tengo que temer ni preocuparme por nada ni nadie.
No existe nadie agresivo, loco, sufriente, moribundo o agónico, desesperado o necesitado... Las desarmonías que quizás se perciban como propias o ajenas sólo son pensamientos erróneos, no borrados por completo. 
Nunca realidades.
Al instante debemos volver a la consciencia del Todo, es decir, sentirnos en la presencia de la Mente infinita y su manifestación infinita. 
No como alguien que está fuera.
Sino como quien es uno con el Ser único eterno, todopoderoso y perfecto. 

ESTABLECERSE EN LA VERDAD

Me cuentas mil contrariedades.
Sin provisión. Cargada de deudas.
Intentando mal vender tus “escasas propiedades” para saldar impagos.
Pero sin comprador a la vista.
Y ante tu relato, me pregunto:
¿Quién eres?
¿Un yo que yerra? ¿Un yo con culpas?
Eso es identificarse con una ficción.
Y aferrarse a un sueño que por tiempos siempre se convierte en pesadilla.
Para resolver de Verdad hay que situarse en la Verdad.
Sólo es la imagen de Dios, del Bien.
Es decir, todos y cada uno, somos la manifestación de la Sustancia infinita.
No hay necesidad en ti ni en mí ni en nadie.
Nada falta. Ni economía suficiente, ni salud, compañía, inspiración, armonía, fe, perseverancia,
confianza, escucha obediente, fuerza...
¿Podríamos rebatir las aparentes carencias desde donde sólo hay nada, ilusión, mentira,
enfermedad, pecado y muerte?
¡Ese lugar no existe!
Ni tampoco el tiempo con sus ropajes de angustiosas urgencias.
Sólo es Dios infinito y eterno. Absoluto Amor dándose sin condición alguna que lo condicione.
Por eso hay que establecerse en la Verdad.
Reconocer que no somos quien yerra o padece.
Identificarnos con nuestro auténtico ser y agradecer todo lo que es –el Bien siempre presente-
para que así se manifieste.
Sin depositar confianzas en soluciones materiales. Ni señalarle caminos a Dios.
 Porque Él nunca tiene que venir. Siempre está.


domingo, 24 de diciembre de 2017

NAVIDAD Y NIÑOS


“Sin niños ¡qué empinado me será celebrar esta Navidad!” –se lamentó mi amigo. 
Y por un instante estuve por manifestar mi acuerdo. Pero amaneció en mi conciencia. Y los pensamientos iluminaron mi reflexión.
 Navidad es la irrupción de la Mejor Noticia en un mundo que a duras penas se arropa con el negro manto de la noche.
El Mensaje anuncia la celestial y definitiva experiencia de la felicidad.
Aunque el símbolo sea un recién nacido, lloroso e indefenso, que a los adultos sólo inspira ternura protectora.
Sólo una actitud atenta y una despabilada capacidad de asombro permiten profundizar en la anécdota de Belén.
El heraldo de la gloria, la que constituye nuestro indefectible destino, atrae a los despiertos pastores que velan sus rebaños.
Y también se deja encontrar por los seguidores de esa estrella que brilla sobre todo cuando más oscura es la noche.
 La Buena Noticia está ahí siempre, incluso fuera de las posadas, en las calles que transita la pobreza y en la soledad de la marginación y la impotencia. 
Como faro que conduce al puerto seguro donde nos espera el abrazo del Padre-Madre.
La Navidad recuerda que ni siquiera en la noche reside el temor y la miseria para los “amados de Dios”. ¡Que somos todos! 
Claro que eso lo descubriremos cuando al sentir el divino seamos impulsados hacia Él, envuelto en la música de sus divinos pensamientos, “sus ángeles”. 
Navidad no es un día de humana nostalgia. O de mirar al pasado, abatidos o con media sonrisa.
Es la fiesta de la trasfiguración de los pesares y de la liberación del miedo.  Es la victoria del Cristo. La actualización del auténtico inicio. Y los comienzos siempre se visten de infancia.
 Para celebrar tanto gozo hace falta un niño. Pero aquel que nunca nació en la materia, ni los años lo envejecieron, ni le ajaron la profunda visión de la inocencia.
La Navidad es para ser festejada con niños.  Pero con esos que son sabios, porque permanecen en el reino de Dios. Es decir, los nacidos en el Espíritu, nunca engendrados en el tiempo, sino en la Alegre Eternidad.
 Y aunque en nuestros hogares este año no haya críos, sí habrá niños: ¡Todos los que escuchan a los ángeles!

FELICITACIÓN NAVIDEÑA

Cuando abundan bellas postales, vídeos con familiares sintonias, imágenes de superficial ternura  y montajes a cual más original, alusivo todo a estas fechas desdibujadas por la intranscendencia y el consumismo, me vuelvo a la felicitación del Padre-Madre:
"Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres que son conscientes de que son amados por Él" (Lucas 2:14). 
Para Dios, el disfrute de la felicidad no es ni el jolgorio vacío de sentido, ni el triste silencio del que no ha descubierto la íntima presencia de la Vida. 
Consiste en algo tan ausente del sueño colectivo como es la PAZ. 
Y en la felicitación de Dios -quien de verdad nos la puede dar porque Él es el infinito y eterno gozo-,  se nos indica el cómo experimentarla. 
Es reconocernos tan llenos de amor -como imágenes divinas  que somos- que sin esfuerzo alguno no dejemos a nadie sin amar, ya que es el Amor el que ama a todos por ser esa su esencia.

sábado, 16 de diciembre de 2017

TODO LO MÍO ES VUESTRO

Estáis en vuestra casa".
"Lo que hay en el ‘frigo’ y en la despensa está a vuestra disposición”.
"Servios lo que necesitéis"
¡Cuántas veces desde una total sinceridad lo hemos repetido a nuestros huéspedes!
Y algo tan simple, hoy me aporta una reconfortante inspiración.
Siempre estamos hospedados en Dios.
Él es nuestra real casa. Y no es menos que nosotros en cuanto generosidad.
Todo lo mío es tuyo” es la permanente invitación del Padre.
Por eso, ahora mismo están a mi disposición todas las cualidades divinas que creo necesitar y que para “el yo” parecen imposibles de ejercitar. Y no tenemos que esperar a un ángel que remueva las aguas de una mágica piscina (Juan 5:1-18).
Sólo “permitir” que Dios se manifieste.
Aceptar que "todo lo suyo es nuestro", y sobre todo aquello que la mente mortal se empeña en convencernos de su carencia.
Sólo saber (de "saborear") que somos el UNO manifestándose.


viernes, 15 de diciembre de 2017

DIOS NO ESTÁ ENCERRADO EN UN SÉPTIMO CIELO

Dios es el Bien. 
Todo lo bueno procede de Él y Lo manifiesta. 
Estemos atentos ahora y siempre a cada gesto de amor dirigido a nosotros o a cualquiera... cada palabra amable, caricia, sonrisa... 
cada imagen que bañe nuestros ojos de belleza, los momentos de paz o de armonía (aunque al principio parezcan pocos)... 
cada buen pensamiento o deseo...
Y descubramos en ello, a Dios cuidando maternalmente de Todo.
Y a nosotros, en medio de ese cálido y seguro abrazo infinito.
Porque no hay que esperar el ascenso a un séptimo cielo para sentir Su íntima cercanía.

jueves, 14 de diciembre de 2017

EL PUNTO DE APOYO

Sé que mi tarea es descubrir el bien, infinito siempre, que Dios ha hecho.
Pero, ¿cómo saco a la luz, la gloria de Dios? ¿Qué me toca hacer?”
Y hoy, la respuesta me ha llegado con luminosa claridad.
“Creer que soy amado inmensamente, sin condiciones y pese a todo. Aceptar el Amor.”
Es decir, dejar de problematizarme, de atormentarme con cuestionamientos sin fin.
Fiarme de Quien es Amor.
Apoyarme como real anawin no en “mis” logros espirituales, sino sólo en Él.
Como lo declara la bienaventuranza evangélica.
Y como Mary Baker Eddy abre Ciencia y Salud: “Para los que se apoyan en el Infinito Sostenedor el día de hoy está colmado de bendiciones”.
Esa es la actitud humana fundamental para “descubrir” el Todo en todo.
Entonces, para terminar vino a mi memoria la “científica” petición de Arquímides:
Dadme un punto de apoyo y levantaré el mundo”.
Qué descanso, saber que todos, ya estamos “apoyados” en ese “punto”, el Amor, que en el Uno somos y que lo puede Todo.

miércoles, 13 de diciembre de 2017

EL GOBIERNO DE DIOS (A propósito de las elecciones chilenas y las catalanas)

En fechas próximas en varios territorios se van a celebrar elecciones.
Y ante estas "fiestas de las democracias" conviene clarificar los pensamientos 
En el hecho de votar yo estoy reafirmando una vez más que el único real gobierno es el de Dios sobre todo y todos. Más que dando mi apoyo a una formación política
Y menos castigar a un político, al negarle mi voto.
Nunca debemos estar en contra de nadie. Si lo hacemos  porque ese tal ha actuado mal, al centrarnos en el error, nos estamos situando en el plano donde nada se arregla porque no es la auténtica realidad.
Las elecciones son una oportunidad para caer en la cuenta de que sólo Dios gobierna.
Es un tiempo para considerar Su gobierno. 
Y como sus leyes no son restrictivas sino de abundancia, de inclusión y no de exclusión. Como no son parciales sino que favorecen a todos, bendiciendo a cada uno.
Porque el ser yo  bendecido no niega o resta la bendición a los demás.
Las vísperas de los comicios son una oportunidad para orar. Mirando no el espectáculo ofrecido por las formaciones políticas, sino el Bien siempre presente.
Por más que el sueño ofrezca “tensión”, “juego sucio”, “reproches”, “conflictos”, “descalificaciones” e incluso “calumnias” nada racionales ni democráticas, tenemos que elevar nuestro pensamiento.
Y ese tomar conciencia de la Realidad Divina en la que siempre estamos, es la que  inspirará lo que tengamos que hacer, seguros que gane quien gane, siempre nos gobernará  el Padre-Madre que es de todos.

viernes, 8 de diciembre de 2017

NAVIDAD 2017



 Al aceptar la única Palabra que es el Cristo, se descubre la luz que somos. Y en ese eterno instante, la armoniosa claridad que disuelve todo Caos, nos regala la más alegre, bendita y continua Navidad. 

Y esto no es un deseo, sino el anuncio de la Amorosa Realidad en que todos estamos. 

En el único Espíritu:

¡Felices fiestas sin fin!


jueves, 7 de diciembre de 2017

EL GRANITO DE TRIGO Y LA HORMIGA


Va para casi cuarenta años que mi sobrina Marta, apenas un bebé, me visitó por primera vez. Sus padres vivían en la ciudad y ella nunca había estado en el campo.
Recuerdo como ansiosa de emoción me tomó de la mano y me arrastró hasta una esquina del jardín. Entonces con unos ojos bien abiertos señaló un punto en la hierba mientras gritaba con su graciosa lengua de trapo:“¡Mira, mira!” “¡Qué bonito!”.
Su maravilloso descubrimiento era una hormiga chiquita y de negrura brillante. Yo nunca había reparado en su belleza. Hasta entonces sus diminutas compañeras sólo eran molestas visitantes de mi cocina a las que debía mantener a raya.
Era la inocencia la que enarbolaba el asombro para contemplar la creación en toda su maravilla y me recordaba la manera de mirar.
La costumbre de ver todo a la luz de un mundo gris (consecuencia de admitir la convivencia del bien y el mal), nos ha robado la capacidad de asombrarnos.
Y es con esa cualidad como mejor se puede captar la presencia de Dios en la intensa aunque breve luminosidad de los vislumbres. Esos que facilitan nuestro camino.
Hoy he tenido este recuerdo al releer “La isla misteriosa” uno de mis libros de ficción favoritos. En el capítulo 20, Julio Verne cuenta como los náufragos han encontrado un granito de trigo en el forro de un chaleco. Sin darle importancia al hallazgo, están por arrojarlo. Pero el científico Ciro Smith, el hombre que de continuo se hace preguntas, les detiene.
"…¿Sabéis cuántas espigas puede producir este grano?... Diez. ¿y sabéis cuántos granos tiene una espiga?... Ochenta por término medio. Así, si plantamos este grano, en la primera cosecha recogeremos ochocientos, los cuales en la segunda producirán seiscientos cuarenta mil y en la tercera quinientos doce millones y en la cuarta ¡más de cuatrocientos mil millones de granos!"
La lectura recuperó mi capacidad de asombro. Sobre todo al concluir el capítulo: “los náufragos siempre hubieran llegado a proporcionarse fuego, ya por un procedimiento ya por otro; pero ningún poder humano les reharía aquel grano de trigo si, por desgracia, llegase a perecer”.

Y ese pensamiento me tiene recogido todo este día en admirada gratitud. Es para quedar en asombrada adoración ante la grandeza divina que se esconde en todo. Así, el tedio es imposible, cuando se puede descubrir el poder y la belleza del Alma hasta en cada grano y en cada hormiguita.

miércoles, 6 de diciembre de 2017

PARA REGRESAR A LA REALIDAD

Me recuerdo las tres preguntas y respuestas que me centran al comienzo de cada jornada.
Y también me re-sitúan en la única realidad cada vez que me siento "como perdido".
1) ¿QUIÉN SOY?
"Mi hijo muy amado".
2) ¿DÓNDE ESTOY AHORA?
Dónde siempre, en Dios, Vida y armonía infinita.
"...en Él me muevo y tengo mi ser".
3) ¿QUÉ ESPERO AHORA?
El Bien, que es infinito porque Es Todo.


sábado, 4 de noviembre de 2017

A PROPÓSITO DEL FRÍO Y LA OSCURIDAD

"¿Qué es el frío?"
Y la respuesta llega sin dudas que sortear.
"La ausencia del calor".
"¿Qué es la oscuridad?"
Y se repite la prontitud.
"La ausencia de luz"
Y "¿el mal?"
...Y apoyados en la Verdad que el Bien es Todo, surge la sanadora declaración:
"La inconsciencia del Bien".
El frío se combate con calor. 
La oscuridad desaparece con la luz.
Y el mal, todo mal (la enfermedad, el dolor, la angustia, el miedo, la soledad, la adicción, amenaza, el conflicto, la falta de empleo, provisión, afecto...) se disuelve con la consciencia del Bien.
¡Activando la eterna, infinita y benéfica Presencia!


viernes, 3 de noviembre de 2017

NO HAY QUE SER SANTO


No me malentiendan. No minusvaloro la perfección.
"Sed santos como vuestro Padre es santo", (Mateo 5:48) es un imperativo mal entendido.
Porque sólo el Santo puede impartir santidad.
Nunca el que no la tiene. Y no vale añadir el "todavía". Porque si no se es santo ahora jamás lo será.
Y no estamos aquí para santificar al yo mortal.

Inútil tarea, además de imposible. Pese a los múltiples esfuerzos; vanos siempre y de contradictorios efectos.
Las consecuencias: Frustración al no lograrlo. O estúpida y confundida vanidad, al creer que se consiguió.
 Pero, acaso no nos debemos "ocupar en nuestra salvación". (Filipenses 2:12)
Por supuesto. No lo niego y sí lo afirmo.
Más describamos la tarea. Se trata de liberarnos. De desatarnos del "yo mortal".
No de hacerlo más perfecto.
Ser consciente de lo que ya somos y siempre fuimos: divina perfección manifestándose en este instante eterno.
Identificarnos y gozar en este aquí y ahora.
No esperar a un mañana hipotético. Existente nada más que en la fantasía del tiempo.
Sólo es el momento presente.
El gozo no tiene comienzo. Es uno con la conciencia de ser.
Si no experimento la felicidad ahora, es que continúo envuelto en sueños.
Y sentir el agradable calor del hogar no depende de nuestros esfuerzos por encender el fuego.
 Ni de alimentarlo con el progreso espiritual del yo.
Esa zarza que ilumina y calienta incombustible lo hace todo por sí misma. 
Para posibilitar el cálido abrazo de la hoguera sólo hay que acercarse. Volverse a lo que es real, Dios.
"Fijad la mirada en Mí y conoceréis que sois santos". (
Isaías 45:22)
Y no hay que hacer más.
Nuestro trabajo es darnos por enterados de la Verdad que nos incluye en la única Santidad y Perfección.   

LEER SIEMPRE IMPORTA

Para "crear" un luminoso cuadro el artista sólo necesita tres colores.
El azul, el amarillo y el rojo. Con ellos consigue todas las restantes tonalidades.
Pero sin olvidar la inspiración. 
Es lo decisivo y lo más importante.
No obstante, para que la obra no quede en simple  proyecto, tiene que estar provisto de las pinturas básicas mencionadas.
Igual ocurre con el tratamiento sanador. 
Las lecturas de las Escrituras inspiradas abastecen de los elementos que la Mente combinará para hacer brillar la armonía donde ésta parecía no estar. 
De ahí la necesidad de la lectura reflexiva y continua de los textos espirituales.
Ya que  a través de ellos, es como el Alma suele despertar a la consciencia de la Vida siempre plena.

jueves, 2 de noviembre de 2017

LA IMAGEN Y SU PATRIMONIO.

La imagen nada es en sí misma. 
Porque separada de lo que manifiesta no existe.
La imagen nunca puede ser un "yo".
Si lo fuera o tuviera algo, eso mismo la descalificaría como imagen.
Y "eso" la haría opaca, eclipsando a Aquel que pretendiera mostrarse.
No se puede doler ni extrañar de no poseer algo como propio.
Su esencial sustancia y actividad es estar fija -sólo atenta- a lo representado.
La ausencia de imagen invisibilizaría al Ser.
Porque ella es el único testigo de Su eterna e infinita Presencia.
Su imagen nunca puede ser la de Otro.
Y no tiene otro soporte que la inquebrantable unidad.
Nada puede separar al Ser de la imagen.
No es sin el Ser. 
Ya que es Su idea. Es decir, Su perfecta visión de Sí mismo.
Y aunque, repito, en sí misma nada es, al reflejar es todo aquello con lo que se relaciona.
Ese es su patrimonio y su armoniosa realidad.

miércoles, 1 de noviembre de 2017

ESCUCHANDO "ÁNGELES" ANTE EL TERROR

Desde Washington me escriben aterrorizados. Con urgencia.  
Se palpa el temblor en los relatos.
Parece que hoy la vida humana nada vale. 
¡Cuando su precio es tan infinito como la única Vida que refleja!
Me piden que ore. 
Y entiendo que yo nada he de hablar, pedir, suplicar… 
Sólo escuchar a los ángeles que Dios envía "para guardar nuestros caminos".
Dos alados mensajes acuden a mi conciencia cuando me visitan noticias de catástrofes o violencia.
El primero está en Lucas 8:22-25.
Jesús duerme en calma, mientras todo es zarandeado por la tempestad. 
¡Que hay más frágil que una barcaza a merced de la furia del mar! 
Pero ni el estruendo, ni las olas llegan a la conciencia del Maestro. 
Ni la preocupación roza su profunda paz.
¿Por qué? Él es "una ley para sí mismo de día y de noche", en la vigilia y en el descanso. Porque siempre se apoya en la benéfica y todopoderosa Omnipresencia del Padre. 
Y en nada más, porque nada más hay.
Por eso cuando le despiertan angustiados, no le posee el pánico.
Es consciente de la totalidad de Dios, que se deriva de Su divina infinitud.
Sabe que al hombre se le dio el dominio sobre todo. 
Conoce por experiencia que sólo el Bien tiene poder.
Etiqueta de “ilusión”  lo que los sentidos físicos presentan como terrible amenaza. 
Y ese nombrar correctamente al mal como lo que siempre es, nada, disuelve lo que sólo es apariencia.
Después pregunta a sus estudiantes: “¿Dónde está vuestra fe?”
Los tsunamis, terremotos, tornados, epidemias,  atentados terroristas, asaltos a mano armada… no se previenen con arquitectura o ingeniería avanzada, panaceas milagrosas,  ni despliegues policiales de élite.
Sólo es necesaria esa fe capaz de mover montañas hasta lo profundo del océano.  
Y no se precisa una gran cantidad. Basta el tamaño de una semilla de mostaza.
Ella ilumina el aterrador escenario y nos descubre que siempre estuvimos moviéndonos, no por caminos peligrosos o escondiéndonos en refugios poco seguros, sino "en Dios donde siempre vivimos y tenemos el ser".
Y así ya podré acoger  con gratitud y comprensión el segundo "ángel" que con el salmo 91 me advierte no poner la esperanza en guardias personales, sino en Dios, nuestro abrigo y escudo.
Y entonces, "Yo lo pondré a salvo, porque él me ama. Lo enalteceré, porque él conoce mi nombre" (Salmo 91:14)
La fe nos hace conocer el nombre de Dios que no es otro que el Amor.
Escuchar que el Padre-Madre nos ama infinita y gratuitamente y sentir Su Presencia, es lo que nos pone a salvo de todo. 
Porque donde es Dios no puede estar el mal. Ya que el perfecto Amor expulsará el temor con todas sus aparentes causas. (1 Juan 4:18) y nos mantendrá en seguro y confortable abrazo.

CUANDO SENTIR LA PLENITUD

Ante el hartazgo de tanta insatisfacción, los salmos (1) nos recuerdan cuando nos aquietaremos con gozo en la búsqueda de la felicidad. 
No se trata de mejorar material o espiritual el “yo” personal.
Ni es embellecer nuestros sueños, expulsando pesadillas.
Ni colmarlos con los objetos de la insaciable necesidad. 
Sólo nos sentiremos plenos cuando despertemos. 
Es decir, al aceptar primero y luego experimentar que somos la perfecta imagen de la Vida, la Verdad y el Amor. 
Y eso “ahora”. 
En este preciso instante que lo escribo o lo leo.
Sin esperar a un más allá.
(1) Salmos 17:15

martes, 31 de octubre de 2017

EL "PADRE DE TODOS LOS MIEDOS"

Si se tiene dificultad para ver sólo el Bien. 
Si lo natural es lo deficiente, lo imperfecto, los límites y las carencias.
El relato del ciego de nacimiento del cuarto evangelio, nos da una clave.
Gozaré de la auténtica visión sólo cuando lave el lodo (el barro adámico) que ensucia mis ojos.
El invidente es todo un símbolo de la humanidad mortal, imposible de disfrutar de la Verdad.
Porque al asumir que nació se encadena al inevitable final de la muerte. 
Ya que todo lo que tiene un inicio también ha de terminar.
Y así percibiré la armoniosa y luminosa realidad en la medida que acepte mi propia inmortalidad, y destierre así de mi territorio mental al oculto “padre de todos los miedos”.

lunes, 30 de octubre de 2017

SACUDIR EL POLVO

Sacudir el polvo para despertar del sueño de la existencia, siempre amenazado de pesadillas es la invitación de Isaías, el profeta (1).
Y así seremos conscientes sólo de lo que es, la felicidad.
Y para ello sólo es preciso desprenderse del "polvo" adámico.
Es decir, de las coordenadas de la materia.
Liberarnos de las ataduras del "tiempo" que nos oculta la infinita armonía del "ahora".
Y de toda clase de "limitaciones".
Pero nos despertamos -no lo olvidemos- sólo cuando sentimos el Amor.
Por eso hagamos y deseemos sólo si somos movidos por el Amor.
Y así, no permitiendo otra intención, disfrutaremos el amanecer del "día" siempre colmado de bendiciones.

(1) Isaías 52:1, 2.

domingo, 29 de octubre de 2017

NUESTRO "PERSONAL" HALLOWEEN


Halloween es una fiesta de importación. No pertenece a nuestra cultura.
Aunque, si lo analizamos con cuidado, toda la humanidad la celebra, aunque no se de cuenta.
No un día cada año, sino a diario.
Porque se cree vivir donde el temor ha ocultado la realidad que es siempre feliz. En casi todas partes se respira una sofocante atmósfera de terror.
Las calles del mundo están llenas de “máscaras”. Aunque alguien las llame “personas” olvidándose que está diciendo lo mismo.
La palabra “persona” proviene de la máscara griega. Un elemento que junto a los coturnos (1) siempre se usó en el teatro heleno.  
Los actores las usaban para ocultar su verdadera individualidad, aparecer como otro u otros, y hacer audible su voz. De ahí el nombre: per-sona (sonar a través de).
Quien así se mostraba a los demás no sólo representaba una ficción sino que ni su rostro, ni su voz, ni su altura se correspondían con la realidad.
Es notable que “mascara” y “persona” estén relacionado con “teatro”, con lo que no es la vida, sino sólo una simulación sin efecto.  
Halloween es una contracción de “All hallow’s eve”, Víspera de Todos los Santos. Festividad instituida el 13 de mayo del 609 para conmemorar la multitud de mártires cristianos de la Gran Persecución de Diocleciano, que hacía imposible el honrarlos uno por uno.
Un siglo más tarde, el Papa Gregorio III la cambió al 1 de Noviembre para contrarrestar y suplantar la celebración del Samhain o festival druida de los muertos. Estos sacerdotes, disfrazados con cabezas de animales e iluminados con una vela que protegían dentro de un nabo ahuecado, visitaban a sus fieles bien entrada la noche. Les pedían alimentos y regalos en nombre de los difuntos. Y si no les entregaban lo que exigían (treat), los amenazaban con terribles maldiciones (trick) .
Por lo que el Halloween de hoy resulta una superficial y grotesca caricatura de la existencia humana.
Los muertos vivientes son sólo disfraces. Las imágenes de terror son artículos de guardarropías teatrales. Los gritos de amenazas, voces de niños impotentes para implementarlas.
Todo ello nos descubre que lo que abruma al mundo es como Halloween teatro y personajes sin vida ni poder. Y nunca realidad.
Pero mejor sería celebrar la Verdad gozando la luz, vistiéndo de blanco y cielo, en vez de negro y sangre. Dando por amor y no chantajeados por la amenaza sin posibilidad ejecutoria.
Y puesto que el nombre de Halloween ha pervertido su significado, yo lo cambiaría por este otro:
HOLY WINS («la santidad es la que vence»)
(1) zapatos de plataforma exageradamente elevada

sábado, 28 de octubre de 2017

EL DIVORCIO NECESARIO

Llegué al límite. 
No soporto más al yo personal que me mantiene al margen.
Al que llena de vanidades, errores y preocupaciones la consciencia. 
No permitiré, de aquí en adelante, sus intentos de arruinar el día con su amargura y frustración cuando cae o se equivoca una vez más. 
Nada tengo que ver con ese Don Nadie que sueña ser mi realidad. 
Por eso declaro con radical firmeza,que doy por terminada la convivencia con ese okupa, orgulloso de su nada. 
E inicio la única separación que es posible en la Verdad. 
Me divorcio del que intenta ser centro de todo, ("ser como Dios"). 
Ignoro a ese presunto fantasma egocéntrico.
Y me sumerjo en la contemplación y experiencia del Amor que soy, y todos somos.

jueves, 26 de octubre de 2017

AL DESPERTAR

Ya estoy aquí. 
Dentro, mas despierto.
Porque ser consciente del "fuera" es permanecer en el "sueño".
Pero Tú, el Espíritu, -mi "Yo soy el que soy", eres mi autentico Ser. 
Mi Vida, mi Mente, mi Ley, mi Alma, mi Amor, mi Realidad.
Así siempre estoy y soy en Ti.
Y al comprender esta maravilla, debo decir "en Mi".
Aunque nada tiene que hablar el yo. 
Mi Mente es la única Palabra.
La del Amor que calma, hace y envuelve en luminosa armonía, Todo.

miércoles, 25 de octubre de 2017

EL QUEHACER DEL YO

El yo sólo tiene que dejar.
Y echarse a un lado una y otra vez.
Hasta conseguir el "fuera para siempre".
Dejar en la puerta del tameión (el aposento interior) los mil asuntos a solucionar.
La creencia de egoÍsmo fuerte y reincidente.
El pensar confuso.
Los proyectos personales.
La voluntad propia.
Los diagnósticos y los pronósticos.
La conciencia de carencia.
El sentimiento de separación.
Las mil y una autocondenaciones y autojustificaciones.
El reaccionar, rumiar y especular.
Las dudas y todas las preocupaciones y remordimientos.
Y así, al entrar, sólo encontraré al Uno.
Y en Él que soy, vivo y me muevo me reconoceré.
Aunque los sentidos que quedaron fuera nada vean ni perciban.
Y será la paz del Silencio que habla en armoniosa alegría.