Subscribe:

viernes, 28 de abril de 2017

LA DIRECCIÓN CORRECTA

"¿Qué hacer?" "¿Qué dirección tomar?" ¿Seguir o no con esta relación? ¿Acepto este trabajo y me despido del otro?
Cuantas veces leo éstas o parecidas preguntas.
Me llegan con frecuencia en los mensajes de ayuda.
Interrogantes que me visitan como propios cuando miro al futuro inmediato y al que ya no parece tan lejano.
Y es que en el sueño, todo se presenta como muy complicado.
Porque esta onírica existencia se mueve en un escenario presidido por la dualidad que se multiplica en el tiempo hasta convertirse en confusa multitud.
Pero sólo hay y es lo UNO.
Es decir, lo que llamamos Dios y su manifestación infinita.
Cuando esta declaración es la única que fundamenta nuestro quehacer, la perplejidad desaparece. 
Puede que esperemos la claridad del Sol envuelto aun en el manto de la noche.
Pero es muy distinto a creer que hay más posibilidades.
Apoyados en la única sustancia, el Bien Infinito, ya no esperamos ansiosos si será un "Sí" o un "No". 
Se trata sólo de un aguardar con paciencia, el seguro amanecer.
Y se cumple lo que dice Mary Baker Eddy: "Cuando  pacientemente esperamos a Dios y buscamos la Verdad rectamente, Él dirige nuestro camino" (Ciencia y Salud 254:11-13)
Cuando reconocemos sólo a Dios en nuestro vivir, mientras parece que buscamos o esperamos ya estamos siempre pisando la meta.
Y la inoperante duda, con su torturante indecisión se disolvió. 

0 comentarios: